Una guía para la prevención y tratamiento de coágulos sanguíneos en casa
Evitar estar inmóvil durante mucho tiempo

Los largos períodos de inmovilidad son el principal factor de riesgo para el desarrollo de coágulos sanguíneos. A veces esto es inevitable, como cuando uno se recupera de una cirugía o debe estar en cama con una enfermedad grave. Sin embargo, hay otras ocasiones en las que las personas no deben permanecer sentadas durante largos períodos por motivos médicos. Los vuelos largos y los viajes en coche prolongados, por ejemplo, aumentan el riesgo de tener coágulos sanguíneos. Uno puede reducir este riesgo estando de pie, caminando y estirando las piernas periódicamente durante los descansos. Hacer que la sangre fluya evita que esta se acumule en lugares donde es probable que se formen coágulos.
