Cómo tratar la bursitis de cadera
Medicamentos anti-inflamatorios

Los medicamentos antiinflamatorios como el ibuprofeno reducen el dolor y la inflamación en la zona afectada. Los esteroides como la prednisona también pueden ser inyectados directamente en las bursas afectadas. Esta última actúa rápidamente para reducir la inflamación y el dolor y, a menos que el problema se repita, normalmente sólo se necesita una inyección. Es imperativo descansar la zona afectada, ya que un mayor esfuerzo sólo agravará la situación. Intente recordar qué actividad le causó la bursitis para poder evitarla en el futuro. Si la cadera se sobreexige de nuevo, es probable que la bursitis vuelva a aparecer. Consulte a un médico si el dolor aumenta, si la articulación no se puede mover en absoluto o si tiene fiebre. Un sarpullido o un moretón en la zona afectada también son indicadores de que puede ser necesaria una atención médica profesional.