Principales síntomas del cáncer de garganta
El cáncer es una enfermedad en la que las mutaciones celulares dan como resultado la presencia de células anormales que se dividen y se multiplican de forma descontrolada en todo el cuerpo. A menudo este crecimiento incontrolado da lugar a crecimientos de tejidos malignos conocidos como tumores. El cáncer de garganta es un tipo específico de cáncer que puede afectar las cuerdas vocales, la laringe y otras partes de la garganta, incluyendo la orofaringe y las amígdalas.Este tipo de cáncer se clasifica como cáncer de laringe o faringe. En comparación con otros tipos, el de garganta se considera relativamente poco común. Las estimaciones del Instituto Nacional del Cáncer sugieren que solo el 0,3 por ciento de los individuos se ven afectados, mientras que 1, por ciento será diagnosticado con cáncer de la faringe o de la cavidad oral. No obstante, es importante comprender los síntomas del cáncer de garganta.
Problemas para tragar

El síntoma más común de la enfermedad es tener problemas para tragar. Esto suele coincidir con una sensación similar a la de la comida atascada en el pecho o la garganta e incluso puede confundirse con asfixia. En términos médicos, esto se conoce como disfagia y, a menudo comienza de forma leve, pero empeora progresivamente a medida que el esófago se reduce. No es raro que las personas cambien sus hábitos alimenticios y su dieta sin siquiera darse cuenta, ya que la deglución se vuelve más difícil.
Por lo general, comenzarán a masticar la comida de manera mucho más lenta y cuidadosa y tomarán bocados más pequeños. A medida que el cáncer avanza, el problema suele empeorar. Los cambios en los hábitos alimenticios progresan más cuando los pacientes empiezan a optar por alimentos blandos que se abren camino más fácilmente a través del esófago. Las personas empiezan a evitar alimentos como la carne y el pan, ya que es más fácil que se atasquen en la garganta. La disfagia puede terminar siendo tan grave que el paciente deba llevar una dieta totalmente líquida. A medida que el cáncer empeora incluso los líquidos pueden empezar a ser difíciles de tragar.
Una tos persistente

Una tos persistente provocada por el cáncer de garganta no suele diferir mucho de cualquier otra. Esta puede producirse de forma aleatoria a lo largo del día o solo por la noche, lo que afecta el sueño y provoca fatiga a lo largo del día siguiente. Muchas personas diagnosticadas con cáncer de las vías respiratorias eran exfumadores o fumadores actuales que pueden haber tenido tos de fumador en algún momento. Si desarrolla cáncer de garganta, la tos puede no diferir de la que había antes, pero a veces se torna más fuerte e irritante.
Ganglios linfáticos inflamados en el cuello

La hinchazón de los ganglios linfáticos del cuello puede ser un signo de muchos problemas diferentes, la mayoría de las cuales no suelen ser graves. Algunas causas comunes incluyen infecciones, resfriados, heridas abiertas o enfermedades que atacan el sistema inmunológico, pero éstas normalmente desaparecen con un simple tratamiento. A veces, sin embargo, las células cancerosas atraviesan el torrente sanguíneo y se establecen en los ganglios linfáticos, aunque también es posible que las células cancerosas se hayan originado allí.Si el paciente es incapaz de explicar lo que podría estar causando la inflamación de sus ganglios linfáticos, probablemente sea el momento de contactar a su médico. Si los nódulos linfáticos son de media pulgada o más grandes, es probable que algo ande mal. Dichos ganglios deben poder moverse y no tienen que sentirse gomosos o duros. La piel alrededor de ellos no debería estar caliente, roja o irritada.
Sibilancias y ronquidos

Las sibilancias y la ronquera son otros posibles síntomas de cáncer de garganta. Las sibilancias se caracterizan por ser un sonido agudo similar a un silbido que se produce al respirar y que suele originarse por la restricción del pasaje de aire. Las sibilancias se asocian comúnmente con el asma, aunque también pueden ser causadas por un tumor en los pulmones. Si descubre que tiene sibilancias o algún otro síntoma como la falta de aire, es momento de ponerse en contacto con un médico.
La ronquera se define como una alteración o debilitamiento de la voz y puede originarse por una variedad de afecciones diferentes, aunque es un síntoma común del cáncer de pulmón. El habla se origina en la laringe, que se sitúa en la garganta. Es posible que la laringe se inflame por sobreexigirla o debido a una infección. Esta inflamación se conoce como laringitis. Como efecto secundario de la quimioterapia, a veces los pacientes con cáncer de pulmón y garganta se enferman de laringitis.
Cambios inusuales en la voz

No es descabellado que se forme cáncer en la glotis o en las cuerdas vocales y provoque cambios inusuales en la voz del paciente, incluida la ronquera que se mencionó anteriormente. Este síntoma es útil ya que es una forma eficaz de detectar diferentes tipos de cáncer de garganta en etapas tempranas. Si nota que su voz ha cambiado y no mejora al cabo de dos semanas, deben consultar a un médico. Si el cáncer no se originó en las cuerdas vocales, los cambios en la voz del paciente podrían no ocurrir hasta que se haya propagado o desarrollado en sus etapas posteriores. Desafortunadamente, estos tipos de cáncer a menudo no se manifiestan hasta que han comenzado a afectar los ganglios linfáticos. Es importante tomarse en serio cualquier cambio en la voz, ya que a menudo pueden indicar un problema subyacente. Si descubre que su rango vocal ha disminuido o que no puede proyectar su voz como antes, es hora de realizarse un chequeo.
Dolor de oído

El tipo más común de cáncer de garganta es el cáncer orofaríngeo. Este tipo puede afectar la base de la lengua, el paladar blando, la pared frontal de la garganta, las amígdalas y las paredes posteriores de la garganta. Suele producirse cuando el daño repetido en los tejidos de la garganta induce un proceso denominado carcinogénesis. Las mutaciones en el ADN de las células dañadas hace que crezcan rápidamente y se dividan sin control. Este mal funcionamiento causa la formación de una masa o tumor en la garganta.
El oído interno y otras estructuras dentro del oído se encuentran cerca de los tejidos de la garganta. Cuando un tumor crece lo suficientemente en los tejidos de la garganta, puede provocar que los nervios en el área del oído se compriman e irriten. Estos generan la transmisión de señales de dolor que el cerebro interpreta como provenientes del área general del oído.
Pérdida de peso

La pérdida de peso ocurre cuando la persona consume menos calorías de las que su cuerpo necesita. Las células sanas requieren calorías para producir la energía necesaria para llevar a cabo sus funciones. Las células cancerosas también requieren calorías para producir su energía. Estas absorben el grueso de las calorías que consume una persona antes de que las células sanas puedan utilizarlas. Esta rápida quema de calorías por parte de las células cancerígenas causa la pérdida de peso como resultado de un balance energético negativo. Además, el cáncer de garganta puede hacer mecánicamente difícil e incluso doloroso para los pacientes consumir suficientes calorías a través de su dieta.
El constante impulso para limpiar la garganta

La mayoría de las personas sanas tiene la necesidad de aclarar su garganta de vez en cuando como respuesta a ciertos alérgenos o agentes irritantes que entran en contacto con los tejidos. Otros lo adoptan como hábito. Sin embargo, limpiar la garganta con frecuencia o constantemente no es normal, especialmente cuando la persona siente como si algo se le atascara o le hiciera cosquillas en la garganta. Las células dañadas en la garganta pueden formar una masa después de haber sufrido el proceso de carcinogénesis o desarrollo de cáncer debido a una mutación del ADN. La masa maligna en la garganta puede crecer hasta un tamaño significativo y hacer que las fibras nerviosas en las áreas y tejidos cercanos se irriten. Las fibras nerviosas irritadas envían señales al cerebro que producen la necesidad de aclarar la garganta.
Dolor de garganta crónico

Las células con mutaciones de ADN que crecen y se multiplican sin control pueden formar una masa cuando una cantidad suficiente de ellas se acumulan en el tejido. Cuando esto ocurre en la garganta, el individuo desarrolla cáncer de garganta. Estas células malignas invaden los tejidos sanos y sus estructuras circundantes, lo que causa daños a las células que componen los tejidos. Este daño celular induce una reacción del sistema inmunológico, que produce hinchazón e inflamación en los tejidos de la boca, la garganta y el cuello. Tal inflamación puede causar que los nervios cercanos se compriman y dañen. Esta compresión hace que los pacientes sientan dolor de garganta crónico.
Dificultades para respirar

Cada vez que inhalamos, el aire se mueve hacia la tráquea antes de entrar en los bronquios dentro de los pulmones. El aire inhalado por la nariz también pasa por la garganta para llegar a la tráquea. Una masa maligna de tamaño significativo dentro de los tejidos de la garganta puede causar una obstrucción mecánica en paso de los alimento para llegar al esófago y del aire para llegar a la tráquea. Esta obstrucción maligna reduce la cantidad de aire y de comida que tiene que moverse a través de la garganta. El estrechamiento de la garganta hace que sea más difícil para un paciente obtener suficiente oxígeno en sus pulmones debido a la reducción del volumen de la entrada de aire. El cerebro percibe este mal funcionamiento y genera la sensación de no poder respirar.